Receta de Torta de Pimiento Molido (Típica Lorquina)

Hola Corazones¡¡¡¡, buenas noches, ya estoy por aquí otra vez. Hoy quiero publicar una receta de torta de pimiento molido típica de Lorca (Murcia), mi ciudad. Para los que nos gusta lo saladito y sabroso, está riquísima, además de poder acompañarla con cualquier cosa (queso, tomate, jamoncito, podemos usarla de base para hacer montaditos, podemos comerla sola...en fin, como más nos guste y nos apetezca).

Tengo que decir que esta entrada se la dedico a Ana Aráez, una amiga a la que quiero un montón y que estaba deseando que hiciera una entrada con recetas. Anica, cariño....dedicada a ti.

Ingredientes:

-1 vaso de aceite.

-1 vaso de cerveza.

-1 sobre de levadura (esto va por gustos, si quieres que salga esponjosa, hay que ponerle levadura fresca y dejarla crecer un poco, y si quieres que salga más fina y crujiente, levadura en polvo). Yo, normalmente pongo 1/2 sobre o un sobre de levadura en polvo como mucho porque me gusta finita.

-Harina (la que admita hasta que la masa casi no se pegue en nuestras manos).

-Pimentón molido

-Sal

-Sardinas (opcional).

Elaboración:

-Cogemos un bol y ponemos el aceite, la cerveza, la harina, la sal y un poco de pimentón molido (el pimentón va un poco al gusto, pero un par de cucharillas o tres estaría bien). A continuación, mezclamos todo bien hasta obtener una masa que casi no se nos pegue en las manos. Una vez obtenida esa masa, la trabajamos un poquito más y la ponemos y extendemos en una bandeja de horno. Si hemos utilizado la levadura fresca en vez de la levadura en polvo, antes de extender la masa, tendremos que dejarla crecer (tapamos el bol donde hayamos amasado con un paño y esperamos).

Una vez extendida bien, echamos un buen chorro de aceite sobre la masa extendida y más pimentón molido y extendemos bien por toda la superficie de la masa (aquí hay que ser generoso con el aceite y con el pimentón). Una vez que la masa se ha cubierto bien, echamos sal y, si nos gusta, podemos poner unas sardinas encima pero bastante separadas las unas de las otras (esto es por darle un poco más de gusto).

Cuando hayamos terminado con este proceso, metemos la bandeja en el horno (previamente precalentado a 180 o 200 grados) y la horneamos hasta que veamos que los bordes están tostaditos.

Una vez terminado todo, ya podemos comerla. Se puede servir fría o caliente, y la puedes acompañar de lo que quieras. A mí, personalmente, me gusta templadita.

Espero que os animéis a hacerla y me contéis.

Os dejo fotitos del antes y del después del horneado.